4 personas
45 minutos
Dificultad: media
Ingredientes
500 gramos de chipirones
1 cebolla mediana
1 pimiento verde
1 vaso pequeño de vino blanco
1 rama de perejil
1 cucharada de pan rallado
2 dientes de ajo
2 cucharadas de salsa de tomate
Pimienta blanca molida
Aceite de oliva
Sal
Receta completa
Los chipirones encebollados es una de las recetas más típicas de los pueblos marineros. También es posible que reciban el nombre de calamares encebollados. La diferencia entre el chipirón y el calamar viene dada por la diferencia de tamaño. Es decir, se trata del mismo molusco cefalópodo, solo que el chipirón es de un tamaño inferior al del calamar.
Se trata de una receta que no supone un gran coste, ya que sus ingredientes son bastante normales y suelen tenerse en casa, y además, no es de una gran dificultad su elaboración. Puede utilizarse como entrante junto a otras raciones en una comida o bien ser el plato principal. Todo depende del tipo de comida que se esté llevando a cabo, además de los gustos de los comensales.
Elaboración de la receta
En primer lugar, hay que limpiar los chipirones quitando la bolsa, ojos, tripas y piel. En este caso, también podemos retirar la tinta ya que no va a ser necesario utilizarla en esta elaboración. Podemos guardarla para otras recetas. Dependiendo del tamaño, si son pequeños se cortan los cuerpos en aros con unas tijeras y, si son grandes, se cortan en trozos guardados. En cuanto a las aletas y las patas, habrá que picarlas. Una vez que ya tenemos todo troceado, se tiene 24 horas en la nevera, sazonados con los ajos que se machacan en el mortero. De esta forma se consigue que estén mucho más tiernos.
Cuando ya han pasado las 24 horas en la nevera, se ponen en una cacerola cubiertos con la cebolla picada menuda, el perejil, el pimiento verde cortado en trozos finos, la salsa de tomate, un poco de pimienta blanca molida, la cucharada de pan rallado y la sal. Es importante poner la sal la última para evitar que la carne de los chipirones tome un color rosado. Por último, se cubre todo con una capa de aceite de oliva. Una vez que ya se tiene toda la mezcla en la cacerola se deja hacer muy despacio, rehogando, de vez en cuando, para mezclar bien los ingredientes. Cuando esté a media cocción será el momento de introducir el vaso de vino blanco. Si hubiera que añadir algo de agua, se hará en muy poca cantidad.
Por último, una vez que ya estén suficientemente tiernos tendremos que retirarlos del fuego. Tras esto, habrá que esperar alrededor de media hora para poder servir nuestros chipirones encebollados tras haber reposado lo suficiente para coger el máximo sabor posible. Una vez pasado el tiempo, ya tenemos nuestros chipirones listos para ser servidos.