Batido de vainilla

Los batidos ya forman parte de la alimentación de muchas personas y es que, aunque no es recomendable excederse en su consumo, tomarlo de vez en cuando es positivo. Uno de los motivos principales de que sea beneficioso es la leche, ingrediente utilizado para su creación. Esta proporciona cantidad de vitaminas, minerales y proteínas además de calcio, algo muy importante para la formación de huesos. En el caso de las personas con intolerancia a la lactosa o que sigan una dieta vegana se pueden elaborar con la leche que habitualmente consumen: de soja, de arroz, de avena, de almendras, etc.

Además, estos batidos de helado son una buena opción en cualquier momento del día. Para desayunar, como postre en la hora de la comida, para merendar...En definitiva, su consumo puede darse fácilmente y el hecho de que su preparación sea tan rápida anima a muchas personas a llevarlo a cabo de forma casera, sin necesidad de gastar dinero y comprarlo fuera de casa.

El sabor del helado pueden variar aunque el de vainilla es uno de los más aclamados

No obstante, existen tantos tipos de batidos como sabores de helados o incluso más, ya que muchas veces se realizan combinaciones de distintos sabores de helado o incluso, helado con galletas u otro tipo de alimentos que dan como resultado un sabor exquisito. En este caso, el batido de vainilla es uno de los más aclamados. Por este motivo, de haber carta de batidos en cualquier restaurante muy posiblemente el de vainilla estará incluido entre las opciones.

Elaboración

1. El primer paso será verter sobre una batidora o un recipiente las bolas de helado y la leche. Será importante que en el caso de escoger un recipiente con cierta altura para evitar que durante la fabricación del batido el contenido se salga del mismo.
2. Tras esto, antes de comenzar a batirlo se aplicará una cucharada de azúcar glass, algo que le dará un toque más dulce y que ganará a los más golosos. En caso de no estar utilizando una batidora y hacerlo de forma casera removiendo la leche y el helado con una cuchara, la cucharada de azúcar se echará mientras se esté batiendo los ingredientes con el fin de que no quede concentrada y se mezcle con la leche y el helado.
3. Lo mismo sucederá con la cucharada de vainilla en polvo. Al igual que el azúcar glass, este ingrediente no es fundamental pero sí aportará un poder extra a la vainilla intensificando su sabor.
4. Una vez batidos los ingredientes, se volcarán sobre un vaso y este se dejará durante aproximadamente una media hora en la nevera. Esto último no será necesario en el caso de que la leche ya esté lo suficientemente fría. Aun así, cada persona decidirá en función de su gusto personal cómo quiere tomarse el batido, si más o menos frío. De hecho, también existe la posibilidad de incluir en la batidora previamente un poco de hielo picado con el fin de darle el toque de frescor y frialdad al batido, algo que se agradece en épocas de calor.
5. Por último lugar, como toque especial puede añadirle un poco de nata montada encima del batido e incluso, sirope alrededor del vaso. Este se pondrá antes de servir el batido sobre el mismo y puede ser de muchos sabores: chocolate, caramelo, fresa...

La nata montada siempre añade un extra de cremosidad a la receta

Además de la receta explicada, como se ha comentado previamente, existen multitud de opciones de conseguir un batido de vainilla. Por ejemplo, en caso de no tener helado bastará con una tableta de chocolate blanco y polvos de vainilla para poder recrear el mismo sabor. En el caso de los veganos o alérgicos a la lactosa, otra opción será utilizar distinto tipo de leche. Y finalmente, en el de los más atrevidos, podrán añadirse algunos ingredientes que le den un toque más original como la canela, las cookies...En conclusión, cualquier persona que lo desee podrá obtener con poco tiempo de preparación y sin necesidad de hacer uso de un gran número de ingredientes un delicioso batido con sabor vainilla.