Ingredientes para Menos 15 Más personas
- Para las cupcakes:
- 120 gramos de mantequilla
- 200 gramos de azúcar
- 120 gramos de harina
- 2 huevos
- 60 gramos de cacao en polvo
- 180 mililitros de leche
- 2 cucharaditas de zumo de limón
- 1 cucharadita de bicarbonato
- 1 cucharadita de levadura química
- 2 cucharaditas de esencia de vainilla
- Para la crema:
- 250 gramos de mantequilla (pomada)
- 300 gramos de azúcar glas
- 3 cucharadas de leche
- 1 cucharadita de esencia de vainilla o de licor
- Colorante alimenticio
- Sal
Receta completa
El origen de estos pasteles se remonta al año de 1796 cuando Amelia Simms publicó una receta en su libro de cocina 'American Cookery', pero no fue hasta el siglo XXI cuando las cupcakes se pusieron de moda en Estados Unidos, donde se abrieron pastelerías que tenían como único protagonista este pastel que recuerda a una magdalena. Quizás la diferencia más clara con un muffin o una magdalena es que este pastel se decora, y su masa es mucho más elaborada.
Elaboración
Lo primero que tienes que hacer es precalentar el horno a 180º y preparar el molde donde harás las cupcakes. Mientras que se calienta el horno, pon en un vaso la leche junto al limón y déjalo reposar mientras haces el resto de la receta. Pon en un bol la mantequilla con el azúcar y mezcla bien los dos ingredientes, hasta que se cree una espuma y empiece a blanquear. Añade poco a poco los huevos, de uno en uno, y bate muy bien. En este momento tienes que incorporar la esencia de vainilla.
A continuación, mezcla la harina con el cacao, el bicarbonato, la levadura y tamiza esta mezcla, para que sea mucho más esponjoso al hornearlo. Después añade todo esto a la mezcla anterior y bate a gran velocidad, hasta que estos ingredientes estén bien integrados. Lo siguiente que debes hacer es incorporar la leche, no te asustes si tiene grumitos por el limón, porque hará que las cupcakes sean mucho más esponjosas. Bate todo muy bien hasta que consigas una mezcla muy homogénea. Cuando lo tengas todo listo, añade la mezcla en cada hueco del molde con su respectiva cápsula, llena solo dos tercios de su capacidad y deja que se horneen durante aproximadamente 20 minutos. Comprobarás que doblan su tamaño y si dudas de si están listas o no, pincha con un palillo para ver si no se manchan. Cuando estén listas, sácalas del horno y déjalas enfriar.
Mientras que las cupcakes se enfrían, prepara la crema que pondrás encima para decorar. Saca la mantequilla de la nevera para que esté a temperatura ambiente. Después disuelve una pizca de sal en la leche. La sal ayudará a potenciar el sabor de la crema y conseguirá equilibrar el dulzor. A continuación, en una batidora mezcla la mantequilla hasta que comience a quedar cremosa. Añade el azúcar glas y la esencia que hayas elegido, puede ser de vainilla o un licor. Una vez que la mantequilla y el azúcar comiencen a integrarse, incorpora la leche y continua batiendo durante unos 10 minutos. Cuanto más tiempo se bata, más esponjosa quedará la mezcla. Añade el colorante que más te guste para dar un poco más de color a la mezcla. Ponla en una manga pastelera y después decora las cupcakes como más te guste.