Receta completa
Las judías verdes son el alimento perfecto para aquellos que quieren degustar un plato sabroso a la vez que ligero. Y es que esta verdura aporta apenas 35 calorías por cada 100 gramos debido al alto porcentaje de agua que posee, un 90% ni más ni menos. Es también una gran fuente de fibra y aporta minerales como el calcio y vitamina B2, B6 y vitamina C.
Sin embargo, no a todo el mundo le gustan las verduras y por ello deciden no consumirlas o consumirlas con muy poca frecuencia, lo cual es un error. Lo mejor que puedes hacer para consumir verduras que no acostumbras a cocinar es incluirlas en una deliciosa ensalada cargada de nutrientes y con un aliño que haga que todo tipo de verdura se venga arriba. De esta forma, descubre una exquisita ensalada de judías verdes, un plato perfecto para cenas ligeras o como entrante en una comida familiar o con amigos. Esta receta es supersencilla y apenas te llevará más de 10 minutos de preparación. Como en toda ensalada, los ingredientes que se añadan dependerán de los gustos de cada persona, por lo que puedes omitir o añadir alimentos según prefieras.
El que sea un plato ligero y sencillo puede provocar que los más glotones se queden con hambre. En ese caso, puedes transformar esta ensalada en un plato mucho más consistente añadiendo simplemente patatas cocidas troceadas, pasta o un vaso de arroz cocido. Lo fundamental es que este plato se consuma siempre frío, lo cual lo convierte en una gran opción para los días más calurosos.
Elaboración
Si las judías verdes de las que disponemos son congeladas, el primer paso será cocerlas en una olla con abundante agua y con sal. Si son judías frescas, antes de cocerlas deberás lavarlas bien, secarlas, cortar sus extremos y los hilos laterales y cortarlas en trozos de aproximadamente cinco centímetros de largo. Antes de añadir las judías a la olla deberás esperar a que el agua empiece a hervir. Cuando esto ocurra, añádelas y deja que se cuezan durante unos 20 minutos, con cuidado de que no queden excesivamente blandas y puedan deshacerse.
Pasado el tiempo de cocción y una vez hayas comprobado que las judías están tal y como te gustan -pueden quedar al dente o más blandas-, escúrrelas bien y ponlas bajo el grifo con agua fría para que dejen de cocerse y no se vuelvan más blandas de lo necesario. El siguiente paso será cocer los huevos. Para ello, pon agua a calentar en otro cazo con un chorro de vinagre y cuando hierva añade los dos huevos. Deberás cocinarlos durante 8-10 minutos y pasarlos después a un bol con agua fría para que no te quemes al pelarlos.
El último paso es preparar la ensalada. En un bol grande vierte las judías previamente cocidas, los huevos duros cortados como prefieras, la lata de atún escurrida y la cebolla ya pelada y cortada en pluma. También puedes añadir una lata de maíz, pimientos morrones e incluso unos taquitos de pavo o jamón cocido, todo depende de ti. Para el aliño añade un chorro de aceite de oliva virgen extra, zumo de limón o vinagre, un poco de pimienta negra molida y sal.
Consejos de preparación
- Si tienes invitados lo mejor será omitir la sal y la pimienta a la hora de aliñar y dejar que cada uno lo añada a su gusto con la ayuda de un salero y un pimentero.
- Para su óptimo consumo, la ensalada de judías verdes debe estar bien fría. Puedes prepararla el día anterior, cubrir el bol con papel film e introducirla en el frigorífico hasta el momento en que la consumas.