Las espinacas con bechamel es un plato fácil de hacer, que está muy rico y además, es saludable.
Receta completa
Esta es una recetasencilla que no tardará mucho en prepararse. La única dificultad que encontrarás es la de realizar la bechamel casera, que es la que debe quedar en su puntopara que luego no se nos quede ni muy espesa ni muy caldosa.
Las espinacas son una fuente rica en proteínas y hierro, por lo que este plato será perfecto para que toda la familia deguste las verduras sin perderse lo mejor del sabor. Puedes seleccionar esta receta para la hora de la comida como acompañamientode un trozo de pescado, como salmón o merluza a la plancha. Aunque para una cena con invitados también es otra de las opciones.
Las espinacas son una fuente rica en proteínas y hierro
Lo primero que prepararemos será la bechamel casera especial para estas espinacas. Para ello calentaremos previamente la lecheen un cazo sin que llegue a hervir. Mientras tanto, podemos ir derritiendo la mantequilla sin sal en un cazo aparte. A este último recipiente le sumaremos sal, pimienta y harina.
Una vez tengamos esta mezcla bien homogénea, añadiremos la leche caliente. Lo removeremos todo con fuego fuerte e introduciremos la nuez moscada cuando empiece a espesarse un poco la mezcla. Lo seguiremos removiendo unos minutos más a fuego más bajo. En este punto hay que ir con precaución para que no se nos quede la bechamel muy espesani tampoco demasiado líquida.
Cuando tengamos lista nuestra bechamel casera, procederemos a preparar las espinacas. Primero lavaremos y cortaremos las verduras, quitando el tallo de estas y dejando solo la hoja, que será la que vayamos a utilizar para cocinar. Una vez tengamos el kilo de espinacas limpio y preparado lo reservaremos.
Los dos dientes de ajo los trocearemos en cachospequeños y los freiremos en una sartén con un chorrito de aceite de oliva. Cuando cojan el punto tostado, y sin llegar a quemarse, añadiremos al recipiente las espinacas. Removemos para que cojan el sabor del ajoy dejaremos que se terminen de calentar por sí solas durante un par de minutos máximo. Podemos taparlas para que no pierdan el calor.
Una vez esté listo esto, añadiremos la bechamel que hemos preparadoanteriormente a las espinacas y el ajo. Lo removeremos todo de nuevo para que se mezcle bien y apagaremos el fuego, dejando que repose durante unos minutos.
Puedes rallar pan y espolvorear antes de añadir el queso o mezclarlo todo
Mientras esperamos, podemos ir precalentando el horno a unos 180 grados de temperatura. Engrasamos una fuente apta para este electrodoméstico-que será mejor si es de cristal- y verteremos todo el contenido de las espinacas con la bechamel en ella. Espolvoreamos el queso parmesano rallado por toda la superficie y dejamos que se gratine durante unos 10 minutos.
Como un consejo extra para darle otro toque de sabor, te recomendamos que añadas a la mezcla de las espinacas pasas y piñones tostados. También puedes rallar pan y espolvorear antes de añadir el queso o mezclarlo todo, para que tenga una textura más crujiente. El beicon puede ser una buena opción si esta receta la vamos a preparar para cenar.
Consejos de preparación
Por último, puedes escoger una manera más atractiva a la hora de servir estas espinacas con bechamel. Para ello debes comparar láminas de pasta ya preparadas e ir añadiendo una cucharada a cada una de ellas. Luego será cuestión de cerrarlas como si fueran tacos mexicanos y dejar que se caliente al horno durante unos 20 minutos.