Receta completa
El verano está a la vuelta de la esquina y, aunque estos días son más parecidos al invierno que a la primavera, el cuerpo se está habituando al calor próximo. A menudo nos apetece otro tipo de comida, menos pesada como el guiso y más saludable y fresco como puede ser una ensalada. En el tema de postres, seguro que ahora cambiarías las torrijas por un buen helado.
Los helados son los protagonistas del buen tiempo y es algo que nos encanta (y agradecemos en los meses más calurosos del año). Los sabores del helado son infinitos, los tenemos desde los más tradicionales como el chocolate o vainilla, hasta los más extraños como el helado de oreo o de chicle.
Si tu postre favorito es la tarta de queso, estás de enhorabuena, porque en esta receta te enseñaremos a realizar la mezcla perfecta, el helado de tarta de queso, también conocido como cheesecake. El origen de este increíble postre puede situarse en Grecia, alrededor del año 776 a.C y, según los estudios, lo consumían atletas que participan en los famosos juegos olímpicos. Hoy en día sigue siendo el favorito de muchos y el más escogido en los restaurantes, por ello no es muy descabellado que también lo tengamos disponible en forma de helado. No te asustes, el nombre puede parecer complicado, pero se trata de un postre de lo más sencillo de realizar.
Elaboración
Cuando ya esté, añadimos el queso en crema y lo batimos, el tiempo justo que lleve integrarlo. A la mezcla, añadimos las galletas(previamente picadas), la mermelada de fresa y las fresas troceadas.
Lo removemos todo bien con una espátula. A continuación trituramos un poco con la batidora. Metemos el bol en un recipiente hermético y al congelador. Sacamos la mezcla cada media horay, con la ayuda de una varilla, removemos la mezcla para romper los posibles trozos de hielo que se han podido formar.
Cuando hayan pasado 3 horas y hayas realizado el ejercicio anterior cada 30 minutos, lo dejamos reposar por otras 3 o 4 horas, dependiendo de lo cremoso que lo queramos. Antes de servirlo, lo sacamos 5 minutos a temperatura ambientey lo adornamos con algo de mermelada, fresas y galletas crujientes. ¡Y ya está! Ya puedes disfrutar del espectacular helado de tarta de queso.