Cocina Andaluza

Las gastronomía andaluza es muy variada y hay mucha diferencia entre le interior y la costa. Esta pertenece a la dieta mediterránea. Pese a esto, la técnica culinaria por excelencia es la fritura, la cual se realiza con abundantes cantidades de aceite caliente en el que se fríen alimentos previamente pasados por harina y sin huevo u otros ingredientes. La excepción es la harina de almorta (derivada de las habas). Los ingredientes característicos son, en primer lugar, el aceite de oliva y los frutos secos. También los pescados y mariscos están muy extendidos por la zona litoral, en especial el atún rojo, la quisquilla, el langostino de Sanlúcar, la gamba blanca de Huelva y el chanquete malagueño. En cuanto a las carnes, son de destacar el cerdo ibérico (especialmente el de Jabugo así como el jamón ibérico) y la carne de caza. Las hortalizas son también muy comunes, con las que se fabrican los conocidos platos del gazpacho, el salmorejo, la sopa campera o el ajoblanco. Los cereales son utilizados para elaborar platos como las migas. Destacan como productos lácteos los quesos de oveja y de cabra, criadas en las granjas más rurales del territorio. En la resportería hay gran influencia de la andalusí medieval. Destacan los pestiños, alfajores y amarguillos, los polvorones y, sobre todo, las torrijas.