Receta completa
Esta sencilla elaboración es capaz de darle un toque diferente a tus platos con tan sólo unos sencillos pasos. La salsa guacamole está hecha principalmente por el aguacate, un alimento muy completo en cuanto a sus componentes nutricionales y que tiene un gran sabor.Â
El estado de los aguacates repercutirá directamente en cómo nos quedará la salsa guacamole que hagamos.Estos deben estar bien madurospara que podamos hacer con su relleno un puré con la ayuda de un tenedor. Los aguacates será lo último que prepararemos para evitar que se oxidemientras preparamos el resto de ingredientes.Â
Cogeremos una cebolla pequeña o, en el caso de que sea grande utilizaremos sólo la mitad, y la picaremos lo más pequeño posible.Haremos lo mismo con el jalapeño que le dará un toque picante especialtÃpico de la gastronomÃa mexicana. Si no te gusta ese toque picante de este pimiento, puedes prescindir de él sin problemas. Aun asà tendrás una salsa deliciosa.Â
Nos desharemos de las semillas del tomate maduroantes de picarlo exactamente igual que hicimos con la cebolla y el jalapeño. Reservaremos estos ingredientes mientras comenzamos a vaciar cada uno de los aguacates maduros. Al estar ligeramente más blandos, será mucho más fácil quitar la piel y el hueso del aguacate. Pondremos la pulpa en un recipiente y aplastaremos con la ayuda de un tenedorhasta que tengamos una especie de puré de aguacate.Â
Finalmente añadiremos el tomate, cebolla y jalapeño picados y mezclaremos con el aguacate hasta que esté todo bien incorporado. Para terminar, añadiremos el jugo de un limón pequeño y salpimentaremos al gustohasta que obtengamos nuestra salsa guacamole a nuestro gusto. Una salsa ideal para compartir con amigos mientras tomáis unos nachoso preparáis unostacos mexicanos.Â
Consejos de preparación
- Es muy importante que los aguacates estén madurosya que si no, será más complicado hacer la salsa y el sabor será diferente.Â
- Para conservar la salsa guacamole sin que se oxide, pon un hueso de aguacate y tapa con papel filmcon este pegado a la salsa. Con la ayuda del limón y el poco aire se conservará mejor.Â