Receta paso a paso
- Pelamos y lavamos las patatas. El corte debe ser lo suficientemente fino pero consistente para que no se dore al instante.
- Añadimos una buena cantidad de aceite en una sartén con un poco de fondo, calentándolo a fuego medio. Incorporamos las patatas previamente cortadas poco a poco, salándolas ligeramente.
- En el caso de que quieras que tu tortilla lleve cebolla, pela una cebolla mediana y córtala en juliana, observando que los trozos sean del mismo grosor que las patatas y lo incorporas al aceite hirviendo.
- Tanto si has añadido cebolla como no, mantén la sartén a fuego medio hasta que comiencen a dorarse, removiendo ligeramente cada pocos minutos. También puedes desmenuzar las patatas con la ayuda de una pala de madera si quieres. Una vez doradas, lo ponemos en un colador para que escurra todo el aceite posible.
- En un recipiente añadimos los huevos, salpimentamos al gusto y con la ayuda de unas varillas batimos hasta que tanto las claras como las yemas de huevo estén mezcladas uniformemente. Las patatas las añadiremos al recipiente donde mezclaremos ambos ingredientes principales.
- En una sartén antiadherente, si es que no se utiliza la misma donde se han hecho las patatas, añadimos un poco de aceite y dejamos que se caliente a fuego medio. Echamos la mezcla de huevo y patatas y dejamos que comience a cuajar. Cuando veamos que ya está parte de la tortilla hecha, nos ayudamos con una pala para despegar los bordes.
- Cogemos un plato llano y lo ponemos encima de la sartén, presionándola con la mano antes de voltear la sartén para que la tortilla se quede en el plato. La deslizamos para poner en contacto la parte cruda de la tortilla con la sartén y así terminar de cocinarla.
- Una vez cuajada subiremos ligeramente el fuego para que termine de dorarse la tortilla y estará lista.
Receta completa
La tortilla de patatas es una elaboración que gusta, prácticamente, a todo el mundo. Es uno de los platos españoles más representativos del país y, aunque pueda parecer una misión imposible, realizar una perfecta tortilla de patatas es mucho más sencillo. ¿Te animas?
Lo primero que debemos hacer es pelar y lavar las patatas. El corte lo tenemos que hacer lo suficientemente fino para que no queden trozos demasiado duros y por lo tanto crudospero no tan finos para que en unos minutos estén completamente crujientes en el fuego.
En una sartén con fondo añadiremos una buena cantidad de aceite de oliva y la pondremos a calentar a fuego medio-alto. Una vez se caliente iremos añadiendo las patatas previamente cortadas poco a poco, rectificando con sal sin pasarnos, ya que no queremos que se quede muy salada pero tampoco muy sosa.
¿Con cebolla o sin cebolla?
El dilema que encontramos a la hora de preparar una tortilla de patatas tiene que ver con la cebolla. Mientras que algunas personas prefieren comerla con cebolla, hay muchas otras que prefieren que el sabor de la cebolla no interfiera con el de las patatas y el huevo. El proceso de elaboración es el mismo pero, enel caso de utilizar cebolla, es ahora cuando tendríamos que empezar a prepararla.
Mientras dejamos que las patatas se hagan a fuego medio-bajo, comenzamos a pelar y a cortar en trozos mas o menos finos la cebolla hasta incorporarla a la sartén las patatas. Dejamos que ambas se hagan hasta que comiencen a dorarse. Muchas personas prefieren que se rompan por lo que con una pala de madera puedes ir aplastándolas ligeramente para que haya trocitos mucho más pequeños. Cuando estén doradas, las sacamos del fuego y las dejamos en un colador para que se desprenda del aceite que sobra aunque también podemos utilizar papel de cocina absorbente.
En un recipiente hondo añadimos los huevos y batimos con la ayuda de unas varillas o, en su defecto, un tenedorhasta incorporar las yemas y las claras. Finalmente mezclaremos las patatas con el huevo para que se quede todo bien incorporado. Rectificamos con un poco más de sal y, si lo deseamos, podemos añadir un poco de pimienta para darle más sabor.
Ingredientes listos, ¿y ahora qué?
En una nueva sartén, al menos que utilicemos la misma donde hemos cocinado las patatas si no es muy profunda y puede dejar la forma de una tortilla redonda, añadimos un poco de aceite y la dejamos que se caliente a fuego medio. Es recomendable utilizar una sartén antiadherenteya que sino la tortilla se pegará y será mucho más dificil conseguir un resultado perfecto. Una vez caliente añadimos la mezcla de las patatas y el huevo y dejamos que comience a cuajarse, bajando un poco el fuego para que no se queme.
Arrastramos hacia dentro la parte cuajada, moviendo el resto de la mezcla hacia las zonas vacias para que se vaya haciendo toda. Cuando veamos que el huevo comienza a ser mucho más consistente cogeremosun plato llano o en su defecto una tapadera lisa para darle la vuelta. Tan sólo tenemos que ponerla encima de la sarten y, con nuestra mano sujetando el plato contra ésta, darle la vuelta hasta que se quede sobre ella. Rapidamente la deslizaremos hacia la sartén de nuevo con el fin de que termine de cuajarse la otra cara de la tortilla.
Tras unos minutos la tortilla estará cuajada por lo que es el momento de aumentar el fuego para que comience a dorarse.La mantendremos mucho más tiempo a fuego medio si queremos que esté bien cuajada por dentro pero si, por el contrario, queremos que quede más melosa, daremos un par de vueltas a la tortilla a fuego alto antes de retirarla del fuego. No te preocupes si la primera vez que preparas una tortilla de patatas no te sale perfecta ya que la práctica hace la perfección.¿Te apetece un pintxo?
Consejos de preparación
- El corte de la patata no debe ser muy fino.
- Es mejor hacer una tortilla en una sartén pequeña o mediana para que no se rompa al darle la vuelta.