Receta paso a paso
- Lava, pela y quítale las semillas a los tomates e introdúcelos en la batidora.
- Añade el ajo pelado y cortado en dos y tritura.
- Una vez obtenida una masa sin grumos, añade la miga del pan (previamente en remojo), el aceite y la sal y vuelve a batir hasta conseguir una masa lisa.
- Deja enfriar el salmorejo en el frigorífico.
- Corta unas rebanadas de pan no demasiado fino.
- Cuece los huevos, córtalos en rodajas y resérvalos
- Saltea los espárragos en la sartén, córtalos en rodajas y resérvalos.
- Tuesta el pan y unta el salmorejo en las rebanadas. Añade las lonchas de jamón, el huevo duro y los espárragos verdes.
Receta completa
Hay quienes han probado el salmorejo cordobés con jamón y huevo por encima pero nunca han tenido el gusto de probar el salmorejo sobre una tosta, y de eso trata esta receta, ya que aprenderás a cocinar unas deliciosas tostas de jamón con salmorejo.
Este plato, que es sencillo a la vez que delicioso, es perfecto como tapa o entrante antes de cualquier comida o bien como plato principal acompañado de una ensalada o unas verduras. Es también perfecto como aperitivo para comidas familiares o con amigos.
La estrella de este plato es sin duda el salmorejo, por lo que el primer paso antes de hacer las tostas, será preparar un buen salmorejo que posteriormente se untará en las tostas de pan. La elección del pan para las tostas depende del gusto de cada persona ya que pueden ser desde rebanadas de pan de semillas hasta pan integral ya tostado. Encima del salmorejo se añadirá el otro ingrediente principal que es el jamón serrano, que irá además acompañado de unos trozos de huevo duro y unos espárragos verdes.
Como ves, se trata de un plato de lo más completo ya que solo el salmorejo se compone de cereales (el pan), verduras (tomate y ajo) y grasas (del aceite de oliva). Su consumo es recomendado para todo tipo de dietas porque no tiene un aporte de calorías excesivamente alto. Por otro lado, el salmorejo cubre muchísimas necesidades del organismo y, en cuanto a los niños, es una manera perfecta de conseguir que estos consuman verduras.
Si ya de por sí el salmorejo tiene un sabor exquisito, al colocarlo en una tosta y acompañarlo de jamón, huevo duro y espárragos estarás creando una combinación perfecta que te sorprenderá a ti y a las personas con las que compartas este rico plato que además es perfecto para consumir con un vino o una cerveza bien fría.
Elaboración
Para empezar a preparar el salmorejo, quita la corteza al pan y en un bol echa la miga y añade un poco de agua para reblandecerla. Mientras tanto, lava los tomates de pera, pélalos, quítale las semillas y trocéalos. Pela el ajo, córtalo por la mitad y añádelo junto con el tomate ya troceado al vaso de tu batidora. Ponla en marcha y tritura hasta conseguir una mezcla sin grumos.
A continuación, saca el pan del bol donde lo tenías en remojo apretándolo para deshacerte del exceso de agua y añádelo a la batidora. Echa a la mezcla un chorro de aceite de oliva y sal y vuelve a triturar con ayuda de la batidora hasta conseguir una masa lisa y homogénea. No tengas prisa en obtener la textura deseada, es un paso que requiere tiempo y deberás darle a la potencia máximo a tu batidora.
Una vez obtenida una masa lisa sin grumos, ya tendrías tu salmorejo preparado. Antes de untarlo en las tostas, introdúcelo en el frigorífico durante unas horas para que se enfríe bien. Cuando adquiera la temperatura deseada, sácalo y empieza a trabajar en tus tostas de jamón con salmorejo.
Si las rebanadas de pan donde untarás el salmorejo no vienen ya cortadas, córtalas con un grosor que no sea demasiado fino ya que con todos los ingredientes que llevará encima puede llegar a partirse.
En una olla pon agua a hervir y cuando esta llegue a ese punto introduce los huevos para que se cuezan durante unos diez minutos. Una vez estén cocidos, córtalos en rodajas finas de manera que haya para todas las tostas y resérvalos para trabajar con ellos más tarde.
Pon un poco de aceite de oliva virgen extra a calentar en una sartén y saltea los espárragos verdes previamente lavados y cortadas las zonas no comestibles. Una vez listos, córtalos en rodajas y con un largo igual al de las rebanadas de pan y resérvalos también.
Ahora sí, es el momento de crear las deliciosas tostas. Tuesta las rebanadas de pan para que obtengan una textura más crujiente y entonces unta el salmorejo en cada una de ellas. Coloca encima las lonchas de jamón serrano deseadas, unas rodajas de huevo duro y unos espárragos verdes salteados. Sírvelas todas en un mismo plato como centro de mesa o bien de forma individual para los comensales que vaya a haber.